O.D.O nació justo antes de la Segunda Guerra Mundial, de padres inmigrantes polacos en Francia.
Después de haberlos perdido muy temprano, se casó joven, tuvo tres hijos y se divorció después de 10 años.
Justo después de su divorcio, trabajó durante varios años para el diccionario francés Paul Robert gracias al cual pudo perfeccionar su educación.
Nutrida por el diccionario, conferencias y reuniones políticas, asistía regularmente a un círculo cultural intenso y diversificado y se inició a las mundanidades parisinas de cuales se alejó rapidamente.
Se orientó entonces hacia el estudio apronfundido de la astrología que practicó durante cuarenta años.
Se fue a vivir a México en un pequeño pueblo pesquero maya sin agua ni electricidad, pero con una imensa playa desierta.
Fue allí donde recolectó cientos de pequeños trozos de conchas que acumuló sin saber porque sino para amaravillarse de tanta belleza nunca vista antes.
En este pueblo donde vivía desde entonces, las conversaciones eran limitadas, otro país, otra cultura...
Empezó a fabricar collares de conchas, para luego realizar la creación de sesenta y cuatro muñequitas que representaban su propio universo, incluyendo 17 personajes que se refieren a la cultura francesa como Carmen o Madame de Pompadour y a la mytologia griega con Ariane y Cylphide.
Es gracias a este arte único y hermoso que Olga pudó vivir unos veinte años sola en este pueblo, donde compusó un mundo mágico para sobrevivir a su aislamiento, que también pudó llenar a travès de sus planetas.
Hoy está enterrada en el cementerio de su pueblo.